Culo, trasero, maleta, popotín,
posadera, pandera, pompis y cachas son
algunos de los nombres dados al par de carnosidades con las cuales nos
sentamos, es decir las nalgas. Esta parte del cuerpo humano desde tiempos muy
remotos ha sido objeto de deseo, y por lo tanto de cierta controversia entre
los que lo ven como únicamente las puertas “sagradas” de los excrementos
humanos y aquellos que lo visualizan como también una zona erógena y sexual.
Independientemente de la
orientación sexual esta parte del cuerpo humano ha provocado un buen número de
alteraciones eróticas en quien lo observa, lo toca o, sencillamente lo
disfruta; y por lo tanto ha sido dibujado, pintado, esculpido, fotografiado,
amado y querido, y al mismo tiempo tapado, escondido, vilipendiado y hecho zona
de castigo. El culo con su par de nalgas ha sido motivo de bellas poesias, de relatos mágicos y fantasticos, por parte de poetas, escritores y juglares, pero también ha sido causas de crueles castigos por aquellos que lo han amado y adorado. No obstante el culo, trasero, nalgas o pompis o como lo quieran
llamar es y seguirá siendo objeto del juego erótico, del deseo sexual de muchos
y muchas, sea cual sea su rol en el acto divino y pecaminoso del amor.
Las nalgas o el culo es objeto de muchos
fantasmas y tabúes que aún hoy son difíciles de sobrepasar, explicar o
comprender, pero es que todo aquello que nos despierta un deseo erótico que no
sea exclusivamente hacia lo genital (vagina o pene) es sometido a muchos
prejuicios, ofuscaciones, obsesiones, desconfianzas y escrúpulos,
principalmente en los más conservadores y puritanos, no obstante el más
“sacrosantos” de los individuos es incapaz de detener su mirada al pasar un
“divino” culo o unas nalgas bellamente generosas.
DE CONCEPTOS, ANATOMIA Y OTRAS
CURIOSIDADES SOBRE A LAS POMPIS O NALGAS.
Nalga según la DRAE en su primera
acepción nos dice “cada una de las dos porciones carnosas y redondeadas
situadas entre el final de la columna vertebral y el comienzo de los muslos.”
Luego Wikipedia nos indica que …“es cada una de las partes carnosas y
redondeadas situadas en la parte más baja de la espalda de algunos animales,
notablemente algunos simios y humanos.” El término nalga proviene del latín
“natis”, término utilizado para referirse a éstas partes del cuerpo; también es
utilizado el término glúteo, no obstante esto es un eufemismo, pues glúteos es
realmente el conjunto de músculos localizados bajo la columna vertebral que es
conformado por el glúteo mayor, el glúteo medio y el glúteo menor.
Las nalgas entonces las podemos
definir como las carnosidades redondeadas situadas en la parte posterior de la
región pélvica de los simios y los seres humanos , y muchos otros bípedos o
cuadrúpedos, y comprenden una capa de grasa superpuesta al glúteo mayor y los músculos glúteo medio.
En muchas culturas juegan un papel en la atracción sexual. Muchas culturas las
han utilizado como un blanco seguro para el castigo corporal. Hay varias connotaciones de nalgas en el
arte, la moda, la cultura y el humor.
Realmente, anatómicamente las
nalgas son un depósito de grasa sobrepuesto a los músculos glúteos (glúteo
mayor, medio y menor). Las masas musculares de los glúteos están separadas por
una división llamada hendidura intergluteal, en la que se encuentra el ano. Las
nalgas tienen como función proteger el ano; ahora la función de los músculos
gluteales o glúteos es permitir que el tronco se mantenga erguido y que el ser
humano sea capaz de caminar sobre dos piernas. De igual manera, la posición sentada
en los homínidos involucra a esta región, el apoyo como tal viene de la
tuberosidad isquiática, masa perteneciente a la parte postero-inferior del
hueso coxal, recubierta a su vez por una bursa serosa, que protege contra la
fricción a los músculos inmediatos; el volumen de las nalgas no interviene en
la capacidad de sentarse. Los músculos de los glúteos ejercen una función
importante en el movimiento de la pelvis, ya que están unidos a ésta.
La cara superior de la nalga
termina en la cresta ilíaca, y el aspecto inferior está delimitada por el
pliegue glúteo horizontal. El glúteo mayor tiene dos puntos de inserción de las
porciones: 1/3 superior de la línea áspera del fémur y la parte superior del
tracto iliotibial. Y como dijimos antes, las masas del músculo glúteo mayor
están separados por un intermedio o hendidura intergluteal hendidura o
"crack" en la que el ano se encuentra.
En los seres humanos, las mujeres
tienden a tener nalgas proporcionalmente más anchas y más gruesas debido a la
mayor grasa subcutánea y caderas proporcionalmente más amplios. Mientras que
los niños humanos generalmente tienen nalgas lisas, sin embargo a medida que el
cuerpo se va desarrollando tanto las hembras y machos tienen diferentes grados
de crecimiento del pelo o vellosidades, como en otras partes de su cuerpo. Las
hembras pueden tener el crecimiento del cabello en la hendidura glútea
(incluyendo alrededor del ano), a veces se extiende lateralmente sobre la cara
inferior de las mejillas. Los machos pueden tener el crecimiento del pelo o
vello sobre algunas o todas de las nalgas.
Las nalgas, tanto en animales
como humanos también ejercen un papel en la atracción sexual y el cortejo,
algunas especies de simios como los papiones, mandriles y los gibones poseen
nalgas callosas y rojizas que cumplen el objetivo de la atracción de pareja en
la especies. En los humanos es utilizada como elemento de atracción
involucrando la vestimenta, por ejemplo unos jeans apretados, pantalones cortos
que enseñen la redondez de estas carnosidades, el uso del hilo dental, todo con
el propósito de originar sensualidad y atraer la mirada del otro.
La forma torneada, curvada,
voluptuosa de las nalgas en el ser humano, la textura de su piel, la lenidad o
la fortaleza que expongan, así como la presencia de un mundo escondido y lleno
de ambivalencias culturales – como el ano – representa un área de intensos y
muchas veces culpabilizadores placeres sensoriales. La importancia que tanto
las mujeres como los hombres dan a las nalgas en la excitación erótica y lo
picaresco o indecoroso puede resultar una interesante mezcla de los mundos
afectivos y placenteros del acto sexual. Las nalgas se han convertido o
conforman parte importante de la cultura erótica occidental desde los
mismísimos griegos que fueron tal vez los primeros que conceptualizaron o le
dieron culto a las bellas gemelas. Los antiguos helenos dedicaron templos a las
nalgas bajo la Diosa Afrodita, llamándola Afrodita Calipigia (en griego antiguo
Ἀφροδίτη Καλλίπυγος Aphrodite Kallipygos, que significa Afrodita de Bellas
Nalgas. Esta Afrodita es un tipo de estatua femenina desnuda de la época
helenística. Representa a una mujer parcialmente cubierta, levantándose su
liviano peplo para descubrir sus caderas y nalgas, y que mira atrás y abajo
sobre su hombro, quizá para evaluarlas. El término calipigio viene del griego
kalós (bello) y pygé (nalgas) que se utiliza para referirse a aquellas personas
que tienen nalgas atractivas.
Cuando existe una obsesión
extrema hacia las nalgas o sólo se puede alcanzar la excitación sexual y el
orgasmo a través del contacto físico o la simple visualización con las nalgas
de una persona es una parafilia conocida como
“Pigofilia” que etimológicamente proviene del griego pigo pygé = nalga,
y filia φιλία = amor.
Los romanos al absorber la
cultura griega tomaron con entusiasmo todos aquellos referentes a lo erótico y
lo extrapolaron y lo llevaron a su máxima expresión, abundaron así estatuas
hermosamente desnudas donde las nalgas eran tal vez la parte del cuerpo más
sobresaliente. Desde entonces las nalgas
han jugado un papel importante en el coito, sea como estimulante sexual o como
centro u objetivo del mismo coito (Coito anal).
La estética de las nalgas fue
notablemente plasmada en las esculturas pertenecientes al periodo artístico
grecolatino. El oscurantismo del medioevo las volvió a ocultar y fue en el
Renacimiento que las nalgas en las artes volvieron a respirar, la tendencia
creció con el Barroco y las nalgas en el arte se volvieron más grandes, más
voluptuosas y hasta más humanas, pues la belleza de las nalgas con anterioridad
eran solo las de los Dioses o semidioses. Pero el pompis siempre fue reflejado
como elemento de erotismo y sexualidad.
Sin embargo en muchas sociedades
el mostrar las nalgas en público es considerado una ofensa o de mal gusto.
Puede dar lugar a un tipo de exhibicionismo, denominado hacer un calvo, que
consiste en mostrar las nalgas para denotar repudio o hacer una broma. También
es un insulto cuando se le dice a otra persona “Besame el culo” o “muérdeme las
nalgas”.
La verdad es que las nalgas son
zonas erógenas que tienen terminaciones nerviosas que se estimulan con la
fricción y los golpes. El spanking o nalgadas puede ser un facilitador para
conseguir el orgasmo pues ya que ayuda a que la sangre se concentre con mayor
rapidez en la zona cercana a los genitales. Las nalgas siempre serán un eterno
motivo de atracción y seducción. Las nalgas evocan sin duda nuestra parte
escondida, es nuestra cara oculta, misteriosamente son notadas aunque llevemos
ropa pero siguen estando escondidas como esconde la luna su otra cara. Por otro
lado, la causa de nuestro hechizo viene sin duda por el hecho de que no tenemos
ningún control sobre esta parte de nuestra anatomía, claro está en el sentido
figurado, pues se nos escapa de nuestra propia mirada y dependemos del otro
para recibir su aquiescencia de belleza y del erotismo que se libra de ellas.
Si bien, otras partes del cuerpo
están investidas por el erotismo
tuvieron y tienen relación con una sexualidad "reproductiva", como los senos
dotados, que ante todo tienen una función maternal, la lactancia, no así las
nalgas que escapan completamente de estos códigos. Se pueden poseer las nalgas
y por supuesto el ano sin miedo alguno a procrear, igualmente su fuerte poder
de atracción erótica está relacionado, como dije antes, muchas veces con la
zurra, la azotaina o las nalgadas. Por otro lado su especificidad erótica reside que al ser
vapuleadas y claramente “maldecidas” por la religión judío-islámica-cristiana
como objetos de deseo erótico, estas partes se vuelven más apetecibles a los
ojos humanos.
El poder de las nalgas en el
deseo erótico y como elemento de seducción ha hecho que en las últimas décadas
se haya desarrollado toda una estética de los glúteos o nalgas. El aumento o
elevación de los glúteos se está convirtiendo en una de las intervenciones de
Cirugía Estética más demandas, puede realizarse mediante implantes o
inyecciones de grasa. La elevación de los glúteos puede realizarse mediante la
colocación de prótesis, injertos de grasa, colgajos dermograsos o a través de
la resección de piel y grasa, dejando, únicamente una cicatriz a nivel del
pliegue inferior de los glúteos. El lifting de glúteos es la cirugía destinada
a marcar el surco glúteo y a eliminar el exceso de piel y grasa en esa zona
(dermolipectomía). Se puede realizar solo o asociado al lifting de la parte
interna del muslo, a la lipoescultura o a la colocación de prótesis.
Cada persona tiene los glúteos de
una forma diferente, existen glúteos con una excelente tonificación muscular,
glúteos con un exceso de tejido adiposo, o culos con una deficiente proyección
superior, media o inferior. Sea cual sea el caso si se va a someter a una
cirugía es necesario ir a un especialista médico o cirujano plástico, no se
debe confiar en peluqueros estetas, brujos o cualquier persona que se dice que
“sabe hacerlo”, busca siempre un profesional pues los buenos resultados pueden
en casi su cien por ciento depender de eso.
El cirujano debe evaluar los
glúteos o nalgas en su conjunto y totalidad, , para obtener un óptimo moldeado
corporal. Así mismo debe observar la
región lumbar, como es el grado de curvatura y componente graso, las caderas y
parte superior de los muslos como el exceso de grasa en la cara interna del
muslo, o en la cara lateral, depresiones glúteas en la parte lateral de este, o
la combinación de varios defectos. También hay que valorar el grado de turgencia
(calidad y textura) de la piel.
En la actualidad existen dos
tipos de intervenciones para realizar una Gluteoplastia, una puede ser a través
de trasplante y otras a través de inyecciones de grasa. La primera,
posiblemente el procedimiento más efectivo, en volumen y forma, sean las
prótesis de silicona para glúteos. Estos implantes son de forma variable,
ovalados o redondos, y con textura diversa, desde lisos a texturizados. La
cirugía dura aproximadamente una hora, con anestesia general, de preferencia.
La incisión es pequeña (aproximadamente de 3 cm a 4 cm) y se ubica entre las
dos nalgas (surco interglúteo). Los pacientes con dos a tres horas de
postoperatorio pueden irse a casa caminando. La sensación de dolor desaparecerá
con cualquier analgésico que es recomendado por el médico. Las prótesis deben
cambiarse, al igual que deben cambiarse las prótesis mamarias. Entre los doce y
los quince años después de la operación estos implantes deberían reemplazarse
para evitar su ruptura.
La segunda opción para mejorar el
aspecto del trasero es la de modelar las nalgas con grasa del propio paciente,
extraída de su abdomen o de sus muslos. Esta grasa puede ir nutrida con
factores de crecimiento y células madre, lo que permite un mejor modelado y un
resultado más duradero. Puede reabsorberse un porcentaje de la grasa, oscilaría
entre el treinta y cuarenta por ciento. Este tratamiento estético es
conocido como “Butt Lift”. La inyección
de grasa tiene la ventaja de que permite al cirujano colocar la cantidad necesaria
en aquellas partes que sean necesarias, facilitando el modelado de los glúteos.
Por otra parte la inyección de grasa no tiene los inconvenientes posibles de
rechazo, de encapsulamiento, infecciones o asimetrías. La técnica de inyección
de grasa de los glúteos se realiza con anestesia epidural o local con sedación.
Muchas mujeres y hombres
obsesionados con tener un “culo hermoso” y apetecible para los otros han
recurrido a cirugías extremas, llegando a mal deformando su figura, no sólo por
utilizar implantes “no admitidos” por la sociedad médica o por inyectarse
sustancias nocivas para la salud, a esto le sumamos que muchos por los altos
costos de los verdaderos procedimientos médicos se someten o confían sus
cuerpos a personas no profesionales en el ramo de la medicina estética.
Las nalgas al igual que cualquier
parte de tu cuerpo necesitan de cuidado, que les quieras, y como cualquier
parte de tu cuerpo que usas para tu sexualidad debe ser usada por ti y tu
amante, esposa(o), u amigo(a) ocasional con respeto y sin llegar a transgredir
la dignidad de ambos como ser humano, si encuentran en las nalgas u otra región
de vuestros cuerpos un gran placer, y llegan a concordar de mutuo acuerdo
usarla para su beneplácito, aprovecha
toda tu creatividad y de seguro será parte de tu repertorio sexual.
Para concluir, cada quien tiene
sus encantos y defectos, no todos somos Apolos o Afroditas, yo por mi
parte soy de los que afirma que debemos
conformarnos con lo que a naturaleza nos dotó, y debemos aprender a disfrutar
de nuestro cuerpo, de cada parte de él. Sin embargo la felicidad es muy
subjetiva y si te desagrada alguna parte de tu anatomía y quieres cambiarla,
“Chévere Cambur” como decimos en criollo, pero no exageres, revisa primeramente
tu autoestima. Si quieres cambiar el tamaño de tus pompis hazlo, pero recuerda
que debes consultar y hacerlo con verdaderos especialistas para lograr tu deseo
de tener “el culín más lindo del mundo”.
Por Félix Esteves