domingo, 13 de marzo de 2011

JAPÓN Y VENEZUELA: de terremotos, tsunamis, reactores nucleares y otros desastres.

Terremoto en Japón, Marzo 2011
Japón acaba de sufrir uno de sus mayores catástrofes de su historia: Dos minutos y medio de terror intenso mientras duró el gran terremoto; la destrucción por el sismo y por el tsunami fue total, sin embargo la angustia que genera la explosión de la planta nuclear de Fukushima va durar mucho tiempo, no sólo en este país que conoce en carne propia las explosiones nucleares y sus consecuencias, acuérdense de Nagasaki e Hiroshima en 1945, sino también para el resto del mundo pues como sabemos las reacciones en cadena de la fuerza o energía atómica corre y vuela despiadadamente.

Japón es un país moderno, desarrollado y con una tecnología de avanzada; este terrible terremoto, según los expertos ha sido el quinto seísmo más intenso de la historia del planeta, y a pesar de la modernidad de “El País del Sol Naciente” y lo bien preparado que esta su población y el estado japonés en estos casos de seísmo, el número de victimas fallecidas es enorme y podría elevarse aún mucho más. No obstante la operación de salvamento nipona ha sido enorme, la armada acudió a las áreas afectadas con una disciplina, precisión y calma pocas veces vista en estos casos, igualmente el pueblo japonés ha demostrado una sobriedad única y un comportamiento civil que dejo pasmado a el resto del mundo, en un momento de verdadera angustia y terror.

Explosión en Planta Nuclear en Fukushima, Marzo 2011
Pero lo peor no parece terminar, una ola enorme y con una velocidad increíble que alcanzó los 800 kilómetros por hora, afecto a la central nuclear de Fukushima, y se produjo una explosión que destruía la estructura que protege el reactor. Enseguida que se supo que había un escape radiactivo el gobierno procedió a evacuar a todos los residentes en un área de 20 kilómetros a la redonda de la central. Según el gobierno el escape nuclear ha sido clasificado como menor, pero aún así está contaminando la atmósfera, con consecuencias aún inesperadas.


Niño maldeformado por la reacción en cadena de la energia nuclear.
Caso Chernóbil, Ucrania 1986
Las autoridades y expertos nipones aseguran que la explosión no ha dañado el reactor, como paso en Ucrania el 26 de abril de 1986 cuando exploto y se incendio el reactor número 4 de la central atómica de Chernóbil. El accidente ucraniano, ocurrido a las 1:23 horas de la mañana, produjo la liberación de enormes cantidades de material radiactivo a la atmósfera, contaminando significativamente grandes extensiones de Bielorrusia, la Federación Rusa y Ucrania, afectando seriamente a la población local. No obstante y a pesar que se dice que en Japón ni ocurrió ni sucederá lo pasado en Chernóbil, la angustia sigue allí y se ha declarado el estado de alerta nuclear.

El año pasado, el gobierno venezolano y el gobierno ruso acordaron que un reactor nuclear se construirá en Venezuela, en fecha sin determinar aún, será utilizado para la medicina e industria, y descartaron la producción de armas u otros objetivos militares. El acuerdo fue suscrito en octubre del 2010 por las autoridades de ambos países durante la visita que realizó el presidente Hugo Chávez a Moscú.

No me quiero imaginar a Venezuela con un reactor nuclear. En un país donde apenas llueve y se colapsa el Metro de Caracas, donde las instalaciones de energía eléctrica no son bien mantenidas y ocurren a cada rato apagones a lo largo del país, donde los accidentes laborales en las empresas de Guayana (o las pocas que quedan) son el pan de cada día, donde vemos el deterioro de la principal empresa económica del país PDVSA que se ha convertido ya en un verdadero desastre, donde los mismos edificios del estado se caen a pedazos, donde ni siquiera el estado puede mantener bien equipados a los hospitales, donde los empleados del gobierno se la pasan en huelga pidiendo mejoras salariales y laborales, donde hoy día se construye un edificio y al año siguiente ya presenta daños porque no tenemos cultura de mantenimiento.

Simplemente y con mucha angustia no me imagino a Venezuela con un reactor nuclear.

Japón, una nación que apenas a mediados del siglo pasado era un país en ruina devastado por una guerra se levanto de sus cenizas y es hoy lo que es, y a pesar de sus terremotos y tsunamis ha sabido levantarse en cada caída, como hoy lo esta haciendo. Venezuela desde el siglo pasado se ha convertido en uno de los países más ricos del mundo por su riqueza existente en su subsuelo, tenemos petróleo, hierro, aluminio, bauxita y pare de contar, además de una tierra fértil que donde cae cualquier semilla enseguida se levanta un hermoso árbol. Pareciera que a diferencia al Japón nuestros principales enemigos no son los catástrofes naturales, son la desidia, la corrupción, el abandono, la falta de compromiso… y unos gobernantes que se preocupan más por llenar sus arcas que por fortalecer a la nación en todos los niveles, como son los sociales, económicos, educacionales y culturales.

En el 2010 Venezuela y Rusia pactaron un convenio de energia nuclear
Venezuela no esta preparada aún para la energía atómica, creo que para eso nos falta mucho que recorrer y aprender… simplemente no me imagino en mi querida tierra venezolana un reactor... donde la orquidea florece, donde el turpial canta en cada arbol, donde coloridas guacamayas en cualquier momento del día cruzan el cielo azul, donde el oso hormiguero baila feliz en su selva, donde las aguas más cristalinas bañan a nuestro pueblo, donde estan las mujeres más bellas del mundo... un reactor nuclear simplemente sería ya una catástrofe total.

Por Félix Esteves

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