lunes, 6 de febrero de 2012

VENEZUELA: POPULISMO E HIPNOCRACIA VS ELECCIONES PRESIDENCIALES.

América del Sur ha tenido un crecimiento económico bastante considerable, además de parecer estable políticamente. Este fenómeno socio-económico se debe a dos sucesos fundamentales: el fin de la guerra fría y la penetración de China en el mercado mundial.

Detrás de todo este bello idilio suramericano se esconde otras realidades, otras verdades. Los países  centroamericanos y México, obviando por supuesto a Nicaragua,  no están protegidos por el “Imperio Rojo Chino”, ya que siguen  vinculados a la economía del Tío Sam y esto, claro está, les impone otra realidad.

En el hemisferio sur que parece tan próspero y floreciente, el ambiente se aciaga cada vez más por la terrible amenaza del populismo. Los gobiernos populistas de Sudamérica se alinean con liderazgos mesiánicos que rebasan la institucionalidad y una articulación de masas en asociaciones, corporaciones o movimientos, organizadas por el Estado, que reprime la representación parlamentaria y se sustenta y alimenta en el presupuesto público, que trabaja y opera al servicio de su causa.

Por supuesto, estos regímenes organizan conflictos, inventan peligros, originan guerras sociales y de clases, y luchan contra las supuestas malignas conspiraciones, se constituyen en los superhéroes de los derechos del pueblo amenazado por el Imperio Yanqui u otros enemigos inventados y en su nombre cercenan libertades para combatir al mal como si se tratara de una guerra santa.

En este sentido, los gobiernos populistas empiezan a “limpiar” al pueblo de sus enemigos internos primeramente, porque el discurso del supuesto enemigo Yanqui u otro archienemigo foráneo se deja para ilusionar al soberano, para engañar al vulgo, mientras en realidad sigue siendo esclavo del Antiguo Imperio (El Yanqui)  y empieza el mismo a ponerse las cadenas del Nuevo Imperio (El Chino). Así la primera maquinación, como es sabido, es derrumbar a los medios de comunicación que no se rigen o se someten al régimen.  

En Venezuela la situación es más que conocida. El gobierno confiscó el primer canal de televisión de señal libre Radio Caracas, y estrechó u obligó a los demás canales a cambiar su tónica opositora, quedando como único bastión de las libertades el canal de noticias Globovisión. El país se va hundiendo en un autoritarismo cada vez más parecido al fascismo, las declaraciones del presidente Hugo Chávez Frías hechas este jueves 2 de febrero así lo hace suponer:


“La oposición ha dicho que hay que limpiar a la FANB (Fuerza Armada Nacional Bolivariana) del chavismo. Tendrían que acabar con la Fuerza Armada, porque la Fuerza Armada es chavista, ¿No lo entienden todavía?”

Sí esto no es fascismo ¿Entonces qué es?


El pueblo venezolano tiene una oportunidad grande de cambiar su historia, primeramente, este domingo12 de febrero cuando se realicen las elecciones de la mesa de la unidad por el candidato que vaya a luchar por las próximas elecciones presidenciales; el 7 de octubre de este  mismo año le toca el verdadero reto a los ciudadanos venezolanos, la oportunidad de sacar el tirano y dejar atrás las patrañas del populismo.

La historia no se equivoca, muchos tiranos se han querido perpetuar en el poder, pero al final siempre caen. Desafortunadamente, la crecida de los precios del petróleo ha ayudado que el populismo chavista se haya perpetrado por tanto tiempo, pero no debido a que ha aprovechado las riquezas en beneficio del pueblo para su educación y su bienestar, los medios financieros ilimitados que hemos obtenido durante este vil gobierno sólo ha servido para  instaurar autoritarismos, y lo que es peor y lo más terrible para comprar conciencia de vecinos internacionales, que imitan la técnica y metodología populista.

El populismo no es nada nuevo y por desgracia es una consecuencia inexorable de la Democracia, todos los candidatos caen en ella a la hora de sus campañas electorales pues le dicen al pueblo lo que el pueblo quiere escuchar muy independientemente de la verdadera situación o de la realidad objetiva.

Tenemos que estar muy atento a los discursos de los candidatos de la mesa de la unidad y sopesar, revisar, comparar, analizar y razonar sobre cada palabra, cada promesa, para votar por aquel o aquella que su política de cambio sea más apegada a la situación del país y se acerque a la realidad en la cual vivimos, el pueblo está cansado de promesas vanas y de cuentos, y más aún de este surrealismo “real-maravilloso” que la hipnocracia de Chávez ha creado y que por infortunio muchos se lo han creído.


La hipnocracia es el estado hipnótico colectivo en virtud del cual un gobernante omnímodo atrae de modo irresistible a gran parte de sus gobernados mediante un discurso reiterativo y dominante.  El presidente de la republica Hugo Chávez Frías desde el primer momento que tomó el poder, casi como un Dios omnipresente y  omnipotente, ha ametrallado cada día a los venezolanos a través de la red nacional de televisión y radio con  su insistente discurso populista y baratero, además que ha regalando dinero y comprando conciencia a montones en vez de regalar puestos de trabajos y oportunidades de progreso. Pero su gobierno falaz ha sido de tal extremo que la hipnosis ha dejado de funcionar y el pueblo venezolano está despertando de tan terrible “sueño conducido”.  Desde las últimas elecciones de la asamblea se demostró que más del 52% de los votantes rechazó las promesas vanas del tirano.

Es necesario que el pueblo despierte en su totalidad del “sortilegio populista chavista”, este 7 de Octubre es un momento de demostrar inteligencia y acabar por todo con el autoritarismo imperante y defenestrar el totalitarismo que la hipnocracia quiere imponernos. Estos últimos meses el gobierno ha querido volver a hipnotizar al pueblo prometiendo casas, becas a las madres desamparadas y regalando el superávit petrolero que cada vez es menor.

Es hora de despertar, de abrir los ojos, pero también de ser valientes: Votemos por el progreso, votemos por las libertades, votemos por conseguir el desarrollo que por catorce años nos han negado.



Por Félix Esteves

1 comentario:

  1. Habra que ver si las elecciones son completamente limpias, pues me temo totalmente lo contrario. Chavez no perdera porque controla la votacion por sus propios medios. Aun si en el supuesto caso que sea derrotado, puede iniciar un golpe de estado alegando cualquier locura. Les deseo que sus sueños se cumplan.

    ResponderEliminar