Pienso que lo que enferma mentalmente a los venezolanos y a todos los ciudadanos que viven en esta tierra olvidada por Dios, es la inseguridad que vivimos al montarnos en una camioneta para ir a trabajar porque no sabemos si vamos a ser asaltados, o el terror que siente una madre al abrir la nevera y conseguir que esta vacía y no tiene con que alimentar a sus hijos para que vayan al colegio, el miedo de salir al cine y que en plena calle te secuestren para simplemente llevarte a un cajero y hacerte sacar los ahorros que tanto han costado, enfermarte de una apendicitis o de un cálculo renal y llegar a un hospital y enterarte que no existen los insumos ni los instrumentos necesarios para salvarte la vida, ir al mercado y ver que la quincena no alcanza porque cada día los precios de los alimentos aumentan, no comprarle a nuestros hijos muchas veces un buen par de zapatos por el temor que cuando salgan a la calle lo maten por robarle los zapatos… ¡Eso si enferma Sra. Luisa Ortega Díaz! Pero además después de tener un día de susto y zozobra imagínese llegar a la casa encender la televisión y conseguir que el Presidente esta encadenado, lo más seguro es que nos volvamos locos si es que ya no lo estamos.
Es graciosos y ridículo para no decir otra cosa ver como los asambleístas, nuestros legisladores, la contraloría y la fiscalía están dispuesto a defender el proyecto de Ley contra los Delitos Mediáticos, seguro que gritaran el slogan que con orgullo vociferan cuando aprueben dicha ley: ¡PATRIA, SOCIALISMO O MUERTE! mientras el pueblo ya no podrá ni siquiera defenderse ya que los medios tendrán la boca taponada y las manos atadas por una Ley que le conviene solo al Tirano y a su fatuo y caricaturesco sequito.