Pasea la alegre rana
en su pequeña laguna
con su vestidito verde
y su chaleco de lana.
Salta la muy loquilla
esta como enamorada
del sapo de pecho fuerte
que nadaba en la fuente.
El amor, el amor
canta la rana en una flor
y de sus ojos de cristal
sale un brillo sin igual.
La ranita esta llorando
desde lo alto del puente
se ha muerto el sapito
se lo llevo la corriente.
Canta la triste rana
en su pequeña laguna
con la tristeza sutil
de una lluvia de abril.
Por Félix Esteves
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